En estos casi 17 años de transmisiones, hemos conocido cientos de auditores que han participado de nuestros programas. Algunos nos acompañan desde los inicios de la radio, otros se han ido sumando de manera paulatina. Pero hay nombres que se quedan en la memoria, por el contacto regular durante nuestro matinal, el cual comenzó en el 2010.
No obstante hay oyentes que nos siguen desde mucho antes, tal es el caso de la Sra Nelly Riveros (Q.E.P.D) quien comenzó a ser parte de nuestra programación en Los recuerdos de la vieja vitrola, cuyos inicios deben remontarse aproximadamente al año 2005
Siempre estaba atenta a nuestro programa, era una enciclopedia del tango, además cantaba no fueron pocas las veces en que se animaba hacerlo a través del teléfono.
El contacto cotidiano hizo que la radio fuese una especie de confidente donde nos relataba sus alegrías y penurias, siempre luchando contra la soledad e impactando a la audiencia de la cual ya era conocida por su vehemencia en cuanto a opiniones que vertía sin filtro alguno.
Hoy nos comunicaron su fallecimiento. Desde hace tiempo estaba su salud quebrantada, murió esperando el llamado del hospital para una cirugía…como tantos otros chilenos a los cuales la salud pública no entrega soluciones.
Su último llamado lo recibimos la semana pasada donde dijo sentirse muy mal. Solo nos pidió una canción, la cual solicito tal vez cientos de veces “Bésame Mucho” de Ray Connif.
Hasta siempre distinguida auditora. Usted nos enseñó que la radio es mucho más que un ensamble tecnológico para emitir música e informaciones. Es compañía para espantar la soledad y lo más importante. Es humanidad para quienes estamos frente al micrófono y nos nutrimos de ella para algún día ser mejores personas
